Es verano y las clases en la cárcel están suspendidas hasta marzo. No es que que los presos salgan de vacaciones, o que yo no quiera ir a la prisión ; por alguna razón que ignoro, el calendario carcelario se asimila al calendario escolar y... se cerró el colegio! Así es que ahora me dedicaré a publicar parte de los cientos (no exagero) de trabajos que he acumulado en 5 años, y quien sabe, quizás hasta podamos sacar el anhelado libro con los trabajos de mis alumnos. Mientras tanto, a los familiares que leen el blog, les pido que lleven mis saludos y buenos deseos.
Que descanses en tus vacaciones Andrea y nuevamente, que bien elegida la imagen.
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